El proceso de dar a luz a un bebé es algo hermoso y que cambia la vida. Para muchas madres, esta etapa requiere un parto por cesárea. Aunque las cesáreas son muy comunes y suelen ser seguras, siguen siendo cirugías abdominales importantes. Como cualquier cirugía, existen posibles complicaciones, y una de ellas es la hernia después de una cesárea.
¿Qué es una hernia por cesárea?
Una hernia después de un parto por cesárea suele ser una hernia incisional, es decir, se produce en el lugar donde el cirujano realizó la incisión durante la operación. Después de una cesárea, el cuerpo necesita tiempo para recuperarse, ya que los músculos y tejidos abdominales tardan en sanar.
Este proceso de curación puede verse interrumpido o debilitado, lo que puede provocar la aparición de una brecha en la pared abdominal. Esto es lo que permite que el tejido, normalmente una sección del intestino se salga hacia fuera y, en ocasiones, se forme un bulto invisible.
Esto difiere de cualquier otro tipo de hernia, como la hernia umbilical o la hernia inguinal, ya que está directamente relacionado con la ubicación de la cesárea.
¿Por qué se producen hernias después de una cesárea?
La aparición de hernias en los partos por cesárea se debe a que la pared abdominal se ha cortado para dar a luz al bebé. Cuando el cuerpo se está curando, el tejido y los músculos deben cerrarse y fortalecerse. Si esto no se hace adecuadamente, la zona quedará expuesta.
Una hernia causada por una cesárea puede producirse debido a varios factores, entre los que se incluyen:
- Complicaciones quirúrgicas: Si la herida no cicatriza correctamente o se infecta, el tejido no puede cerrarse por completo.
- Esfuerzo excesivo: El esfuerzo excesivo durante el proceso de cicatrización, al levantar objetos pesados o demasiado pronto, puede ejercer presión sobre la zona en proceso de cicatrización.
- Embarazos múltiples o cirugía: Con otra cesárea, la pared abdominal se debilita aún más.
- Problemas de salud preexistentes: Los problemas para una cicatrización adecuada pueden estar causados por diabetes, obesidad o tos crónica.
Básicamente, cualquier cosa que cause una tensión adicional a la incisión en proceso de cicatrización aumenta la probabilidad de desarrollar una hernia.
¿Las hernias son frecuentes después de una cesárea?
Las hernias por cesárea no son muy frecuentes, pero se producen. Los estudios indican que una cesárea tiene un riesgo del 0.0-5.6% de desarrollar una hernia incisional en función de atributos personales como la salud, el procedimiento quirúrgico y los cuidados posoperatorios.
Aunque estas cifras pueden considerarse pequeñas, cuando se realizan varias cesáreas al año en diferentes partes del mundo, el número de mujeres afectadas es elevado.
Lo positivo es que la atención adecuada y el diagnóstico temprano reducen significativamente la posibilidad de complicaciones graves.
Diagnóstico de una hernia por cesárea
No debes ignorarla si crees que tienes una hernia. El diagnóstico temprano ayudará a evitar problemas más graves.
Normalmente, tu médico:
- Hará una exploración física: Te palpará la zona que rodea la cicatriz para identificar la presencia de protuberancias o falta de fuerza.
- Preguntará sobre los síntomas: ¿Sientes dolor, problemas digestivos y en qué momento del día notas más el bulto?
- Solicitará pruebas de imagen: Una ecografía, una tomografía computada o una resonancia magnética para verificar el diagnóstico y el tamaño y la gravedad de la hernia.
Una derivación temprana te ayudará saber qué hacer y a evitar complicaciones como la obstrucción intestinal o el estrangulamiento.
Síntomas de una hernia tras una cesárea
Es importante estar atenta a los síntomas de una hernia tras una cesárea. Hay signos que pueden aparecer poco después de la cirugía y otros que pueden tardar meses o incluso años en manifestarse. Los siguientes son los síntomas más comunes que se pueden observar:
Abultamiento abdominal
- El signo más común es un bulto o hinchazón visible alrededor de la cicatriz de la cesárea.
- Puede ser más notorio en caso de toser, ponerte de pie o hacer fuerza con el abdomen.
- El abultamiento a veces desaparece al acostarse.
Dolor y malestar
- Dolor o molestias alrededor de la cicatriz que causan dolor al moverte o levantar peso.
- El dolor puede aumentar con el tiempo si la hernia empeora.
Náuseas y estreñimiento
Pueden aparecer síntomas digestivos cuando una parte de los intestinos se atasca en la hernia.
Enrojecimiento, sensibilidad o calor
Esto podría ser un signo de infección o inflamación, por lo que es necesario acudir a un médico especialista.
Pesadez o debilidad
- La pérdida de apetito o la dificultad para mantenerte derecha también son indicios en la mayoría de los casos.
- En caso de dolor agudo, vómitos o hinchazón repentina, acude al médico de inmediato, ya que pueden ser indicios de una hernia estrangulada, que es una emergencia médica.
Opciones de tratamiento para una hernia tras una cesárea
Una hernia que se ha desarrollado tras una cesárea se trata según su tamaño, ubicación y gravedad.
Tratamiento no quirúrgico
- Las hernias pequeñas e indoloras pueden ser objeto de un seguimiento minucioso en lugar de tratarse de inmediato.
- Tu médico puede recomendarte cambios en tu estilo de vida, como mantener un peso saludable, no levantar objetos pesados y utilizar una faja de soporte abdominal para aliviar la tensión.
Reparación quirúrgica
Normalmente se requiere cirugía en caso de que la hernia sea dolorosa o peligrosa:
- Reparación abierta de la hernia: El cirujano realiza una incisión para volver a colocar el tejido en su sitio y reforzar la zona con una sutura o una malla.
- Cirugía laparoscópica: Procedimiento poco invasivo que consiste en realizar una pequeña incisión e introducir una cámara.
La reparación quirúrgica tiene un índice alto de éxito y previene complicaciones como el estrangulamiento o la obstrucción.
Recuperación tras una hernia después de una cesárea
La recuperación tras una cirugía de hernia también lleva tiempo, y más aún si el cuerpo ha sido sometido a una cesárea.
- Recuperación temprana: La mayoría de las mujeres pueden reanudar actividades ligeras entre 2 y 4 semanas.
- Reduce el esfuerzo físico: No levantes objetos pesados, no hagas ejercicio físico ni realices esfuerzos durante las 6-8 semanas.
- Control del dolor: Toma los medicamentos recetados por tu médico y cuida tus heridas
- Visitas de seguimiento: También es importante acudir a revisiones periódicas para comprobar la evolución e identificar cualquier problema que pueda surgir.
El aspecto más importante para evitar la recurrencia es la paciencia y un buen tratamiento.
Factores de riesgo para desarrollar una hernia tras una cesárea
Algunas causas predisponen a la aparición de la hernia:
- Cesáreas repetidas: Las cirugías repetidas causan una debilidad adicional en los músculos abdominales.
- Obesidad: El sobrepeso causa un estrés adicional en la región en proceso de curación.
- Recuperación lenta de la herida: Los tejidos pueden verse afectados por una enfermedad como la diabetes o una infección.
- Tabaquismo: Retrasa la cicatrización porque disminuye el riego sanguíneo de los tejidos.
- Actividad física prematura: El senderismo y realizar ejercicios vigorosos durante el periodo de cicatrización de la herida pueden interferir en la cicatrización.
Cuando exista más de uno de estos factores de riesgo, debes tomar precauciones adicionales.
Cómo prevenir una hernia cesárea
No todas las hernias se pueden prevenir, pero hay cosas que puedes hacer para reducir el riesgo:
Sigue las instrucciones postoperatorias
Descansa cuando te lo indiquen y evita el trabajo duro en las primeras etapas de la recuperación.
Ayuda a tu abdomen en la recuperación.
El uso de una faja de soporte abdominal, como la faja posparto Momcozy Ergowrap™ puede:
- Darte soporte ligero
- Aliviar el dolor de espalda
- Facilitar el movimiento.
Soporte Lumbar
Comodidad
Eficacia
Mantén un peso saludable.
La pérdida de peso gradual reducirá la presión sobre la pared abdominal.
Sigue una dieta saludable que prevenga enfermedades.
Los alimentos ricos en proteínas, vitaminas y minerales ayudan a la reparación de los tejidos.
Evita levantar objetos pesados,
especialmente durante las primeras 6-8 semanas después de la cirugía.
Trata los problemas de salud crónicos.
Controla afecciones como la diabetes o el asma para ayudar a mejorar la cicatrización.
Posibles complicaciones de una hernia cesárea
La hernia no tratada puede producir complicaciones graves:
- Encarcelamiento: La hernia no se puede empujar hacia dentro y queda atrapada, lo que provoca un dolor insoportable.
- Estrangulamiento: Se interrumpe el suministro de sangre en una sección del intestino, lo que provoca la muerte de los tejidos y una operación de urgencia.
- Obstrucción intestinal: Puede producirse una obstrucción si el intestino se ve afectado.
- Infección: Esto ocurre especialmente cuando el tejido está inflamado o dañado.
Estas complicaciones son crisis médicas y deben tratarse de manera oportuna
Preguntas frecuentes
¿Qué tan común es una hernia incisional después de una cesárea?
Las hernias incisionales se desarrollan en aproximadamente el 4 %-10 % de las mujeres que han tenido una cesárea, en relación con factores como la salud y las condiciones de cicatrización.
¿Puedo tener otra hernia cesárea?
Sí, si has tenido una hernia anteriormente, podrías correr el riesgo de tener otra. En lo que respecta a futuros embarazos, debes seguir un tratamiento y cuidados adecuados.
¿Una hernia puede causar gases?
Sí. Las hernias por invaginación intestinal pueden causar síntomas digestivos como estreñimiento, gases atrapados e hinchazón.
Conclusión
Una hernia tras una cesárea puede ser una experiencia desagradable, ya que causa cierto estrés, pero saber los síntomas de una hernia incisional, una detección temprana, tratamiento y medidas preventivas, la mayoría de las mujeres la superan.
Con las medidas adecuadas, podrás proteger tu abdomen, evitar complicaciones y concentrarte en lo que realmente importa: disfrutar de tu nuevo bebé.